Finalmente Fernando Geronés, Carlos Coloma y el resto de los acusados por el desfalco conocido como “las empresas fantasmas” tuvieron que sentarse en el banquillo de los acusados en el inicio del juicio que se les sigue en su contra.
En otra maniobra judicial para seguir dilatando, la acusada Norma Borda y su abogado –el ex concejal geronesista, Gustavo Becerra González– no se hicieron presentes; situación que obligó al Tribunal a declararla “en rebeldía”, exigiendo su presencia en los próximos 3 días.
La deliberada ausencia de Borda hizo que debiera determinarse un cuarto intermedio en el juicio, que se retomará el próximo 17 de octubre. Una derrota para la estrategia de Geronés, quien venía haciendo todo lo posible para evitar la foto que ilustra esta nota.
Su abogado, Daniel Brola; no pudo conseguir el visto bueno de la Cámara para suspender el juicio hasta que se resuelva el nuevo pedido de prescripción presentado. La “chicana” esgrimida será materia de análisis durante el juicio y resuelta al momento del fallo, tal como lo dispuso el TOC N° 4 que lleva adelante el proceso oral y público.
Se estima que el lunes siguiente los acusados oirán del tribunal la acusación formal, el fiscal Claudio Pelayo y el querellante, Juan Carlos Feustel; se expresarán al igual que los defensores y es posible que los primeros testigos tengan tiempo para brindar su testimonio.
Por lo pronto el juicio se llevó a cabo, aunque en forma parcial; y las “chicanas” no lograron evitar que el pueblo de Quilmes pueda saber quienes fueron los responsables de malversar casi 9 millones de pesos mediante la contratación de empresas inexistentes, manejadas por personas de bajísimos recursos que, incluso ante la justicia; no pudieron decir como se llamaban las compañías de la que aparecían regenteando y por las que cobraron sumas millonarias de dinero.
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