MAS DE 300 PLACAS SUSTRAIDAS Y NO HAY INFORMACION OFICIAL
Este lunes informamos que durante la semana anterior, un grupo de desconocidos robó más de 300 placas de bronce de las bóvedas del Cementerio Municipal, provocando destrozos en muchas de ellas.
Más de 100 bóvedas fueron atacadas por los delincuentes en una tarea que demandó seguramente varias horas y apoyo para los delincuentes, una tarea que no pudo pasar desapercibida para el personal que trabaja dentro de la necrópolis.
Lo mismo que el traslado de estas placas: tampoco puede realizarse en bolsos o mochilas, dado que la cantidad de bronce sustraído supera los 500 kilos, para lo cual debió ser necesario un vehículo dentro del propio cementerio.
El lugar más afectado es la calle más cercana a la administración, donde se encuentran los mausoleos de Bomberos Voluntarios y en homenaje a Juan Domingo Perón y Eva Duarte.
Las autoridades del cementerio señalaron a los familiares que se presentaron a quejarse que los supuestos ladrones eran dos menores apoyados por un mayor. Poco creíble de por si dado que el trabajo de palanquear las placas es una tarea que requiere de mucha fuerza, pero insólitamente no le han dicho a los deudos donde esta radicada la denuncia, que dependencia policial o judicial actuó y si se recuperó parte o el total de lo sustraído.
Lo grotesco de la excusa oficial es la recomendación de las autoridades a las familias para que radiquen la correspondiente denuncia. ¿Cuál sería el sentido de hacerlas si, teóricamente la efectuó el propio Cementerio?.
Debido a las características del robo éste no pudo llebarse a cabo en los horarios donde el cementerio esta abierto al público. Entre las 18 horas y las 7 del día siguiente, en el lugar hay personal de seguridad, el que se supone debe recorrer el lugar. Así se quedaran quietos en las oficinas de administración, debieron haber oído el vehículo que se desplazaba por las calles internas y alguien debió franquearle la salida hacia el exterior.
Por lo pronto, y pese a las denuncias y la difusión del hecho, las autoridades municipales no han efectuado la menor comunicación sobre lo ocurrido.
Este lunes informamos que durante la semana anterior, un grupo de desconocidos robó más de 300 placas de bronce de las bóvedas del Cementerio Municipal, provocando destrozos en muchas de ellas.Más de 100 bóvedas fueron atacadas por los delincuentes en una tarea que demandó seguramente varias horas y apoyo para los delincuentes, una tarea que no pudo pasar desapercibida para el personal que trabaja dentro de la necrópolis.
Lo mismo que el traslado de estas placas: tampoco puede realizarse en bolsos o mochilas, dado que la cantidad de bronce sustraído supera los 500 kilos, para lo cual debió ser necesario un vehículo dentro del propio cementerio.
El lugar más afectado es la calle más cercana a la administración, donde se encuentran los mausoleos de Bomberos Voluntarios y en homenaje a Juan Domingo Perón y Eva Duarte.
Las autoridades del cementerio señalaron a los familiares que se presentaron a quejarse que los supuestos ladrones eran dos menores apoyados por un mayor. Poco creíble de por si dado que el trabajo de palanquear las placas es una tarea que requiere de mucha fuerza, pero insólitamente no le han dicho a los deudos donde esta radicada la denuncia, que dependencia policial o judicial actuó y si se recuperó parte o el total de lo sustraído.
Lo grotesco de la excusa oficial es la recomendación de las autoridades a las familias para que radiquen la correspondiente denuncia. ¿Cuál sería el sentido de hacerlas si, teóricamente la efectuó el propio Cementerio?.
Debido a las características del robo éste no pudo llebarse a cabo en los horarios donde el cementerio esta abierto al público. Entre las 18 horas y las 7 del día siguiente, en el lugar hay personal de seguridad, el que se supone debe recorrer el lugar. Así se quedaran quietos en las oficinas de administración, debieron haber oído el vehículo que se desplazaba por las calles internas y alguien debió franquearle la salida hacia el exterior.
Por lo pronto, y pese a las denuncias y la difusión del hecho, las autoridades municipales no han efectuado la menor comunicación sobre lo ocurrido.
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