El Hospital de Quilmes, “Isidoro Iriarte” viene siendo protagonista de vergüenzas cotidianas desde hace varios años. Pese a la dedicación de sus profesionales y trabajadores, los desatinos de sus últimos directores han convertido en nosocomio público en aquello que tan bien reflejara “La Clínica del Doctor Cureta”, historieta de la inolvidable revista “Humor” que luego fuera llevada al cine.
Este martes la vecina Yanina García llevó al hospital a sus 4 chicos dos de los cuales tenían fiebre con temperaturas superiores a los 38 grados. En el “Iriarte” se negaron a atenderla aduciendo la carencia de pediatras, y la derivaron al Dispensario Municipal, donde la volvieron a mandar al Hospital dado que no funciona el equipo de rayos X.
Esta mañana en el programa “SIN VUELTAS” (FM Plus 96,1) Yanina – que vive en el barrio Santo Domingo- relató esta insólita e inexplicable vivencia que atravesó en el hospital dirigido por Gustavo Wanschaffe.
“Lleve a mis chiquitos porque tenían fiebre. Mi nena de 11 años estaba con 38,5° y el nede de 3 años con 39°. Apenas llegué me dice la gente de seguridad que no podía entrar porque no había pediatras en la guardia y me sugiere que vaya a los pisos para ver si conseguía un médico que los atendiera. Hice eso, fui a los pisos pero no encontré médicos. Me atendió una enfermera que ni siquiera se tomó el trabajo de tomarles la temperatura o auscultarlos. De muy mala manera me dijo que me tenía que retirar, que llevara a los chicos al dispensario porque no me podían atender” –indicó Yanina.
Las desventuras de la joven mamá no terminaron allí. Ante la imposibilidad de atenderlos en el Hospital, se trasladó con sus cuatro hijos –dos con fiebre- hacia el Instituto Municipal Ramón Carrillo (ex Dispensario).“Estuve haciendo cola durante tres horas. Finalmente me atendieron, no se si era una pediatra o una médica clínica, pero los auscultaron y le tomaron la temperatura. Ahí le diagnostican al más chico un principio de bronquiolitis y me dicen sobre la necesidad de hacerle radiografías de pulmón; pero me vuelven a mandar al Hospital de Quilmes, diciéndome que l aparato de Rayos X no funciona desde la tormenta”.
Yanina relató también que otra mamá con un chico que no paraba de vomitar, corrió la misma suerte. “Me hubiese gustado llevarla en un remis, pero no entrábamos. Me quedé preocupada por esta señora, porque no la vi en el dispensario y no se si terminó volviendo a su casa. Me dijo que vivía en una villa cercana al Hospital”.
La incalificable vivencia de Yanina y sus hijos se da en un marco de ocultamiento por parte de las autoridades del Hospital y la Secretaría de Salud de la comuna respecto a la Gripe A.
Como señalamos estos días, el Hospital de Quilmes cerró su guardia el lunes por la noche debido al virus de Influenza H1N1, y trasladó en forma compulsiva a los internados en la guardia.
Los principales síntomas de esta enfermedad son justamente la fiebre y el decaimiento del paciente. Justamente el cuadro que presentaban los dos hijos de Yanina. Que nos depara a los vecinos si en medio de una epidemia, el hospital se niega a atender a las personas que presentan indicios sobre la enfermedad.
N. de la R: Agradecemos a “El Diario de Quilmes” que publicó ayer la noticia sobre Yanina
