Conducir por las calles de Quilmes es desde hace muchos años, una tarea riesgosa debido a la cantidad de baches y la inseguridad reinante.
Pero hay calles donde ese riesgo se multiplica mucho más. Es el caso del acceso sudeste desde la rotonda de Avenida Smith hasta el límite con Berazategui.
Además de la basura y el agua acumulada; transitar por el acceso a una velocidad media puede romper el tren delantero de cualquier auto debido a la cantidad de roturas en la acera.
Baches inmensos convertidos en la noche en verdaderos “cazabobos” donde los ladrones se hacen un festín. Es imposible transitarlos a más de 20 kilómetros por hora, por eso allí se juntan los delincuentes para asaltar los autos armas en mano, y despojar a los conductores de cuantos bienes tienen encima.
Aquellos que lo transitan habitualmente, saben como evitarlos; pero un día de lluvia –cuando el agua los tapa- hay que ser clarividente para no “comerselos” y quedarse estancado en el intento.
Aquellos que lo transitan habitualmente, saben como evitarlos; pero un día de lluvia –cuando el agua los tapa- hay que ser clarividente para no “comerselos” y quedarse estancado en el intento.
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