Gracias al trabajo realizado desde la subsecretaría de de Género y Familia, a cargo de Ileana Lengua; se pudo rescatar a un matrimonio y sus seis hijos que eran sometidos a una condiciones laborales de servidumbre en una carbonería ubicada en calle 892 bis entre 801 y 802 del barrio de La Paz.
El matrimonio –oriundo de Santiago del Estero- junto a sus hijos con edades entre 5 y 19 años; eran sometidos a condiciones extremas de trabajo por 200 pesos por día. Habían sido engañados cuando fueron traídos desde el norte por un sujeto llamado Dogoberto Suarez –de 53 años de edad- quien les prometió trabajo; para luego condenarlos a condiciones extremas de trabajo e higiene.
Con la información aportada desde la dependencia municipal; el jueves por la tarde se desplegó un operativo ordenado por la UFI N° 1 Descentralizada de Berazategui a cargo de Daniel Ichazo; y personal policial de la Comisaria 3ª y Cibercrimen de Berazategui; con la colaboración del ministerio de Trabajo y del programa de Rescate y Género y Diversidad de la Comuna quilmeña.
La familia era explotada y denigrada en todo lo relacionado a su condición humana desde hace 3 años por Suarez quien habría aprovechado una visita al Norte del país para contactarlos y convencerlo de que irse con él era la mejor opción.
Cuando llegaron el inescrupuloso sujeto los hizo a vivir en un viejo depósito en Quilmes, donde también obligaba a los ocho a trabajar durante todo el día envasando carbón por 200 pesos diarios. Al comienzo, toda la familia dormía en un único colchón y no tenían camas ni muebles de uso cotidiano, tampoco cocina.
Para colmo Suarez les pidió sus DNI con la promesas de gestionarles nuevos documentos, y los dejó indocumentados.
Pocos meses después los mudaron a una vivienda peor que donde estaban originalmente, con una habitación y un baño instalado dentro del mismo dormitorio.
Una vecina de la zona fue quien realizó la denuncia ante las autoridades municipales y desde la subsecretaría de de Género y Familia se informó de la situación a la justicia,
Los trabajadores sociales de la Municipalidad de Quilmes que visitaron el lugar pudieron observar que el sector de la cocina se encontraba bloqueado con una madera porque tenían prohibido el paso. En la habitación había dos camas: una de dos plazas y otra de una. Sin embargo, sólo podían usar una porque la otra era de la propietaria de la casa. De igual forma, tenían prohibido usar algunos los muebles porque también le pertenecían a la dueña del lugar.
Tanto el matrimonio como sus hijos fueron sometidos a exámenes médicos que no presentaban situaciones graves, aunque los niños fueron afectados en los bronquios cuando vivían dentro de la carbonera y actualmente padecen vómitos y malestares.
Pese a que Dagoberto Suarez fue imputado de “Trata de Personas y Reducción a la Servidumbre”, no fue detenido y sólo se le comunicó su situación procesal en la sede policial
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