El viernes pasado el Concejo Deliberante de Quilmes, manejado por el “gutierrismo”, aprobó un crédito de 56 millones de pesos a pagar durante 5 años con los votos de los mayores contribuyentes cuyo mandato feneció el 30 de abril.
El crédito cuyo destino se supone la municipalización de la gestión de residuos urbanos, requiere de la aprobación por parte de esta asamblea de concejales y vecinos. Según la Ley Organiza de las Municipalidades, cada año deben elegirse a los “mayores contribuyentes” cuyo mandato termina el 30 de abril, tal como lo expresa el artículo 94° de esa norma.
Sin embargo el “gutierrismo” sentó en sus sillas a los vecinos elegidos el año anterior.
Los concejales de la oposición (FAP, UCR, Coalición Cívica y Frente Kirchnerista) denunciaron esta ilegalidad y se retiraron del recinto, anunciando una presentación judicial para anular la sesión.
Sobre el tema hubo varios dictámenes de la Asesoría General de Gobierno provincia y el Tribunal de Cuentas.
REAPARECIO EL PRO
El “gutierrismo” tuvo durante la sesión dos concejales menos: Se trató de la “sciolista” Cora Otamendi y del oficialista, Franco Buono; quienes no concurrieron por problemas de salud.
Fue entonces cuando reapareció el PRO, quien en los últimos meses había optado por una política distante del gobierno, o mejor dicho, de un acompañamiento disimulado.
La necesidad de llegar al quórum volvió a sentar al “macrismo” local en complicidad con “Ali Barba”Gutiérrez. Así fue que Nora Saracco y Luis Bratti se sentaron en el recinto y levantaron la mano a favor de endeudar a la comuna por un crédito del que existen más dudas que certeza.
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