Francisco “Ali Barba” Gutiérrez es gremialista. Por ende debería conocer los derechos de los trabajadores y sobre todo, la seguridad laboral.
Sin embargo su gobierno ha puesto a mujeres de planes sociales a realizar trabajos de hombres, pagando salarios miserables en comparación con los convenios colectivos del sector.
En Quilmes son varias las mujeres del plan Argentina Trabaja a quienes se obliga a subirse a los volquetes de camiones para efectuar la recolección de la basura en el servicio municipal.
Son jóvenes que ganan unos 2.500 pesos por mes, mientras el salario de un recolector supera los 12.mil. Trabajan en condiciones ilegales ya que la ART no cubre posibles accidentes laborales en un trabajo que no le es propio del género.
Para ser recolector se requiere de varias condiciones físicas dado que es un trabajo desgastante e insalubre. Por eso no se convoca a mujeres para realizarlo y ninguna empresa privada ni pública las tiene en su plantel.
Es un claro caso de explotación laboral que además abre otros interrogantes: ¿Qué tareas realizan los casi 200 trabajadores de la empresa COVELIA que fueron contratados por la comuna cuando se municipalizó el servicio?
Estos trabajadores pasaron a la planta municipal con sueldos superiores a los 12 mil pesos. A ellos se le agregó un grupo de municipales el área de Servicios Públicos y la totalidad de los barrenderos.
No se han aumentado los circuitos ni la cantidad de recorridos de los camiones. Sin embargo se apela a obligar a mujeres de cooperativas para que hagan trabajos de hombres que deterioran notoriamente la salud.
O tal vez ahora tengamos también “ñoquis recolectores”
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